La Historia de Carlee: Aceptando Mis Labios Naturales
Hola, soy Carlee. Tengo 27 años, vivo en Estados Unidos y quería compartir algo personal, esperando que resuene con otras mujeres que alguna vez se hayan sentido diferentes o inseguras con su cuerpo. Quiero hablar específicamente sobre mis labios vaginales.
Desde que era adolescente, supe que los míos eran más grandes que los de la mayoría. Al principio no sabía qué pensar—no había visto muchos ejemplos, y los pocos que vi en los medios o en internet no se parecían a lo que yo veía en el espejo. Mis labios menores miden naturalmente unos 9 cm cuando están relajados, lo que genera un bulto visible al usar leggings ajustados o traje de baño. Al principio trataba de esconderlo. Me ajustaba la ropa, usaba blusas largas o evitaba ciertas prendas.
Pero con el tiempo, algo cambió. Me di cuenta de que esta parte de mi cuerpo—totalmente natural y sin ningún tipo de estiramiento—no era algo de lo que debía avergonzarme. Simplemente es así. Nunca he practicado estiramiento ni modificación de labios; así nací.
Al principio lo mantuve en privado. Pero poco a poco entendí que hay muchas mujeres que se sienten cohibidas por tener labios más largos. Fue entonces cuando decidí hablar—porque sé lo aislante que puede ser ese sentimiento. Quería mostrar que no es raro, ni incorrecto, ni algo que deba ocultarse. Para mí, mis labios se sienten bien. No pienso en ellos todo el tiempo—son simplemente parte de mí, como cualquier otra parte del cuerpo. Y sí, también brindan mucha estimulación, algo que he aprendido a valorar.
Incluso he compartido algunas fotos en espacios seguros y de apoyo para mujeres—no para impactar, sino para ofrecer perspectiva y tranquilidad reales. Si eres de las que se preocupa porque cree que sus labios son “demasiado grandes”, quiero decirte: no lo son. No estás sola y no hay nada antinatural en ti.
Venimos en todas las formas y tamaños. Y a veces, aquello que más nos causa inseguridad es lo que más nos conecta con nuestro cuerpo.
Con cariño,
Carlee
